
Una vida socialmente saludable solo se consigue cuando en el espejo de cada alma, la comunidad entera encuentra su reflejo; y cuando la virtud de cada uno vive en toda la comunidad.
R.Steiner
R.Steiner
Desde tiempos muy antiguos, las culturas de todo el mundo han celebrado rituales que marcan los ciclos estacionales, y los festivales en las escuelas Waldorf hacen eco de estas celebraciones. El propósito de los festivales es, por un lado, darle regularidad al ritmo anual que vive el niño, y con esto, certidumbre en lo que está por venir, y por otro, despertar su reverencia natural por lo maravilloso y bello de la vida. También tenemos festejos propios de nuestra cultura, así como eventos de carácter social.
A lo largo del ciclo escolar, la Escuela Waldorf de Cuernavaca festeja épocas y celebra encuentros en los siguientes festivales y eventos:
San Miguel personifica la lucha entre el bien y el mal que vivimos tanto en el mundo externo como en nuestro mundo interior, y exalta el valor necesario en esa lucha.
Festejo tradicional mexicano con toda la comunidad escolar.
San Martín es la inspiración personificada de virtudes como la compasión y el desprendimiento.
Nos recuerda la luz espiritual que cada ser humano alberga en su interior.
El bazar navideño es a beneficio de Probeca y la generación de noveno, y la Pastorela es un regalo de los maestros a los niños.
Lulú, la mascota de la biblioteca Lechuzas, sale de su escondite para invitar a los niños a la lectura.
Reunión de toda la comunidad escolar en un ambiente natural y enteramente al aire libre.
La oportunidad para conocer el trabajo de los alumnos, escuchar testimonios de exalumnos y recibir clases impartidas por maestros de la escuela, tal como se las dan a los niños.
Celebra el resurgimiento de la vida; los niños buscan los tradicionales huevos de Pascua y germinan semillas (en el jardín de niños).
Festival en beneficio de Probeca.
Culminación del bloque de Grecia, parte del currículo de Historia Antigua del grado.
Actividades con las que se propone terminar el ciclo escolar.
Juegan un papel importante los Representantes de Grupo quienes coordinan el apoyo que se brinda a la escuela y a las iniciativas en la realización de los eventos de la comunidad. Trabajan coordinadamente para la consecución de sus objetivos, encabezado por las Coordinadoras de Representantes de Grupo, una por nivel.
Parte fundamental para la vida y permanencia de nuestra escuela son los padres de familia, que contribuyen al fortalecimiento de la comunidad escolar participando en diversas iniciativas. Su impulso se encuentra con lo pedagógico en el conocimiento que pueden ir adquiriendo de los principios que guían la educación Waldorf gracias a las juntas pedagógicas, los foros para padres, los grupos de estudio, de trabajo artístico y manual y los festejos estacionales.
Se reúne todos los martes para elaborar objetos acorde a la pedagogía y que pueden ser utilizados por los alumnos.
Tenemos una larga historia de colaboración voluntaria por parte de los padres, manifiesta actualmente en el grupo Probeca, fundado desde hace más de 15 años y sostenido desde entonces por padres de familia dedicados a la recaudación de fondos destinados a apoyar la situación económica de familias con dificultades para pagar las colegiaturas.
Se reúne los viernes y trabaja un repertorio que acompaña el que los niños preparan en sus clases de música y coro. Participa en los festivales y presentaciones escolares. Todos son bienvenidos.
El interés de los padres de familia en temas relacionados con la Antroposofía y la pedagogía conduce a la creación de grupos de estudio. El que está activo se reúne los miércoles de 8 a 9:30 hrs.
Tienda de la escuela donde encontrarás juguetes de materiales naturales, muñecas Waldorf, bebés, duendes, diversos objetos hechos por miembros de la comunidad; materiales como estambres, lana, hilos, lápices, ceras, etc., así como libros de la editorial Antroposófica.
Una razón de ser de las escuelas Waldorf es formar personas socialmente responsables. Como padres de familia, somos el primer ejemplo. A través de tequios, reuniones, trabajo comunitario y muchas otras actividades, podemos dar de nosotros mismos, como individuos y como familias, a la comunidad de nuestra escuela y a otras comunidades que lo necesitan.